MANATÍES Y SENEGAL. RAZONES PARA LA ESPERANZA.

Lo normal es que las noticias sean malas en estos tiempos que corren. Pero, de vez en cuando, el mundo gris y oscuro, deja pasar un destello de luz fantástica. En este caso, se trata de la vida de 5 animales fantásticos en el oeste de África; pero, sobre todo, del apoyo de los habitantes del lugar. El que los habitantes de las poblaciones rurales tengan conciencia de la importancia que tiene el preservar las especies que les rodean y conservar su medio natural, es lo mejor de la noticia. El que se hayan involucrado y el que los niños, sobre todo, hayan estado presentes como actores de una aventura de conservación y salvamento, es muy importante.

SIRENAS DE MARES Y RÍOS
Hay un grupo de mamíferos marinos que son mucho más desconocidos que los cetáceos (delfines, ballenas...) o los pinnípedos (focas, leones marinos...); se trata de los sirénidos (manatíes y dugongos), que son animales lentos y pesados que nunca salen de las aguas, muy tímidos y difíciles de observar, totalmente vegetarianos, sumamente pacíficos -no pelean jamás ni entre ellos mismos- y amantes de la tranquilidad. Se les conoce también como "vacas marinas" y sus parientes más cercanos son, sorprendentemente, ¡los elefantes!, con los que comparten características únicas (un corazón dividido, falta de glándulas sudoríparas, reemplazode dientes...). Al igual que delfines y ballenas, son animales que "regresaron" (hablando a escala evolutiva) al medio acuático.

Los dugongos son marinos pero los manatíes también viven en estuarios y ríos tropicales de aguas lentas. Hay 3 especies de manatíes: el de Florida y Caribe (que son dos subespecies), el de Amazonas (que cuenta con una subespecie más, miniatura), y el de África, del que trata nuestra historia de hoy. Éste puede medir 4 metros y pesar media tonelada.
EL PRIMATE HUMANO Y LOS SIRÉNIDOS

Son especies muy antiguas que llevan en el planeta desde la época de los dinosaurios. Pero, como siempre, en cuanto el primate humano rompió su armonía con la Madre Naturaleza, dejó maltrechas sus poblaciones con matanzas absurdas, e incluso fue exterminada totalmente una especie que vivía en el estrecho de Bering ¡tan sólo 27 años después de su descubrimiento!. Fue descubrirla y empezar a machacarla. Pobre vaca marina de Steller, vio aparecer al ser humano y no pudo defenderse contra su monstruosidad.

Son animales de lento crecimiento y una tasa reproductiva bajísima, por lo que son muy frágiles ante las amenazas humanas. Los manatíes de África occidental están amenazados por la caza furtiva, la destrucción de los ríos, y la pesca accidental en redes, muy frecuente en algunos lugares. La población de manatíes de Senegal ha descendido a la mitad en las últimas décadas y ya se encuentran al borde de la desaparición. Está en la Lista Roja de la UICN.

Viven en estuarios y ríos costeros desde Senegal hasta Angola. Antes, se movían libremente por el agua dulce hasta el océano, pero hace medio siglo se construyeron dos enormes presas hidráulicas en Senegal y Mali, lo que destruyó por completo la dinámica del río. Los manatíes de río quedaron aislados del mar. Ahora, se dirigen a praderas acuáticas donde se alimentan. Pero son lugares de aguas profundas, y cuando el cauce baja, se convierten en trampas mortales. No es algo natural sino causado por la destrucción de la dinámica fluvial por culpa de las presas, construídas para intensificar la agricultura y obtener energía (¡cuánta destrucción hemos provocado en el mundo con nuestro hambre de energía!). Estas presas han terminado también con la riqueza pesquera, lo que está acabando con los sistemas tradicionales de subsistencia de la región. Los seres humanos actuamos siempre ciegamente sin pararnos a pensar.

LA OPERACIÓN DE RESCATE. En enero han sido rescatados en Senegal 5 manatíes que estaban atrapados en un brazo de inundación del río al haber descendido críticamente el nivel de las aguas. Estaban sentenciados.
Wetlands International y la ong Oceanium de Senegal pidieron ayuda urgente. Acudieron el Servicio de Parques Nacionales y la Sociedad de Gestión Hidrológica del río, la Agencia de Cooperación Internacional al Desarrollo, la Fundación CBD-Hábitat y Wildlife Trust de Florida. Pero me gustaría destacar, sobre todo, el que las autoridades locales y la población de los pueblos cercanos, se implicaron con su ayuda incondicional. Se movilizaron 6 pueblos. Lo más bonito es que, después de ello, los habitantes no sólo han comprendido por qué se deben proteger los manatíes, sino que además se han comprometido más aún poniendo en marcha un sistema de vigilancia para localizar más manatíes amenazados por la bajada de las aguas (no son fáciles de localizar).
Fueron liberados en el río principal, a 3 km. Por lo visto, hay más manatíes atrapados en brazos de inundación, por lo que se trabaja en planes de ayuda para cuando comiencen a secarse.